Al Caribe

Tortuguero, sin tortugas. Bueno pues nos decidimos a visitar Tortuguero, un pequeño pueblo mundialmente conocido por la llegada masiva de tortugas de distintos tipos para desovar en sus playas. Para acceder al pueblo hay que hacer una especie de gincana, primero has de llegar por autobús a La Pavona, un embarcadero donde te esperan los locales para llevarte por el río hasta el pueblo, como curiosidad, Tortuguero tiene una población de casi el 90% de nicas, dada la proximidad de Nicaragua y a que en Costa Rica se gana bastante mas dinero, al llegar a la Pavona fuimos "fichados" por un guia que deambulaba por allí, ya en el barco recorrimos parte del río San Juan que es la frontera natural entre los dos países, fue un paseo sin mayores incidencias. Llegamos a Tortuguero, varias personas nos habían dicho que Tortuguero es uno de los pueblos mas turísticos de Costa Rica, ya estábamos sobre aviso, aunque cuando llegamos no vimos rastro de turistas.
Lo de siempre, búsqueda de hostel, esta vez llegamos a uno que no estaba mal, incluso estaba frente a la playa (a 200 metros, pero frente a la playa). Reconocimiento del pueblo donde notamos que es mas turísticos por todas las tiendas de souvenirs que hay en la calle principal, las calles son de arena y el pueblo esta situado en una lengua de tierra entre el río y el mar Caribe, no te puedes bañar en ninguno de los 2, en el río hay "lagartos" y en el mar corrientes peligrosas. En uno de los paseos por el pueblo dimos con una pequeña tienda regentada por Rafael, otro guia (en este pueblo todos son guias) muy majo y de fácil palabra, estuvimos hablando con el largo y tendido, nos contó historias del pueblo y de como empezó el turismo por allí. Al la mañana siguiente teníamos una excursión al Cerro Tortuguero de 160 m. de altura! Fuimos con un par de francesas en una lancha que nos dejo en una playa desde donde comenzamos nuestra subida, nuestro propósito: ver las ranas blue Jeans.
La subida no fue difícil, salvo por el barrizal y la abundante vegetación, alguno tuvo algún traspié, pero nada grave, lo que impresiona es la humedad y la facilidad que tengo para sudar, puag que asco!
Durante la subida vimos muchas ranas blue jeans, yo creía que seria mas difícil, pero no fue así, estas ranas eran utilizadas por los aborígenes para cazar, les extraían el veneno y untaban sus flechas, luego había que limpiar la carne.
Las vistas desde la cima del cerro están bien, no son impresionantes, pues solo ves selva, aunque te das cuenta de lo difícil que es llegar a Tortuguero, pues ves la lengua de tierra rodeada de agua por todos lados y puedes ver los canales que tiene el río San Juan. Mas ranas, alguna serpiente y de vuelta al bote para regresar al pueblo, pero de camino oímos a los monos, así que cámara en ristre fuimos a verlos, pudimos ver también a un trogon, un pájaro muy colorido pues es familia del quetzal.
Por la tarde, alguien nos dijo como entrar en el parque sin tener que pagar los acostumbrados 10$, como teníamos tiempo y era gratis fuimos a verlo, cogimos un sendero que recorría en paralelo la playa, no vimos muchos bichos, aunque molaba estar rodeado por selva, decidimos volver andando por la playa, por si veíamos alguna tortuga despistada, no hubo suerte.
Por la noche, aunque el guia nos insistió en que hiciésemos el tour para ver las tortugas, decidimos dar un paseo por la playa por nuestra cuenta, cogimos las linternas y salimos a la playa, después de un rato pudimos distinguir algunas luces al fondo e ilusionados nos dirigimos a ellas, que sorpresa! Teníamos delante de nosotros un grupo que parecía que miraba a una tortuga, digo que parecía, porque no se veía un carajo, además el guia del grupo nos echo de la playa, porque o pagas o no tienes derecho a ver na de na, aunque pagando tampoco se veía nada! Que timo!!

Costa Rica, tierra soñada por mi!!! Pacifico Sur.

Despues de un breve paso por Lima, donde teniamos que coger el avion a San jose, aterrizamos en el aeropuerto de esta ciudad. San Jose dicho por los mismos "ticos" es muy feo y un poco peligroso, con las mismas nos fuimos a la "Coca-Cola" que es la estacion de buses. Ya de entrada nos dimos cuenta que las calles no tienen nombre, y las indicaciones aqui van por los centenares de metros que has de recorrer.

Nuestro primer destino fue Jacó, alli llegamos despues de un viaje accidentado, donde el chofer arreglo una averia, con gente sentada en los pasillos y amenazando lluvia, esta se presento nada mas entrar en Jacó. Alli nos dimos cuenta de dos cosas: la diferencia de precios en los hostel, y que cuando empieza a llover posiblemente ya no pare en toda la noche.
Por la mañana fuimos a la playa, primer bañito en el Pacifico, parecia mentira con lo que llovia la noche anterior, pero teniamos un sol radiante!

Otro bus para llegar a Manuel Antonio, nuestro primer destino "real". Como a estas alturas ya no sabiamos en que dia viviamos descubrimos que el P.N. estaba cerrado, que pena tener que pasar el dia en la playa!

Arena blanca, agua caliente, y unas olas muy chulas para la practica del surf. Yo que soy de secano, alli me meti con mis gafas de bucear, como me lo estaba pasando con las olas, hasta que una me agarro y me volteo todo lo largo que soy, el resultado? me golpeo la cabeza con el fondo quitandome la piel de la frente!

Al terminar el dia y a la hora acostumbrada empezo a llover. Asi que de cervezas en el porche de nuestras cabinas.

Al dia siguiente ya si que pudimos visitar el parque, es uno de los mas pequeños, pero se ven muchos animales, nosotros sin guia pudimos ver un bambi, a los perezosos, monos aulladores, titis y capuchinos, estos ultimos son unos cotillas y se cruzan en tu camino para ver si les das comida, vimos tambien unas cuantas "ratas gigantes, unos basiliscos y unas gallinas corredoras" una pena no ser un experto en naturaleza para saber que estas viendo. Hicimos varios senderos por el parque bañandonos de vez en cuando en las playas tipicas con palmeras y arena blanca.

Uvita fue nuestro siguiente destino, alli se encuentra el P.N. Marino Ballena, si lo buscais por google maps podreis ver que el arrecife tiene la forma de una cola de ballena, de ahi su nombre. Este sitio es ideal para ver delfines y ballenas como tambien para hacer snorkel, lastima porque no era epoca de hacer ninguna de las dos cosas, nos cogimos las gafas de bucear y fuimos por nuestra cuenta, paseando por la playa nos encontramos con un monton de cangrejos enormes, uno se engancho en mi chancla y no hubo forma de soltarlo, ya en el agua vimos coral y algunos pececillos de colores. A la hora de comer, descubrimos la cantidad de cocos que habia por la playa, como llevaba mi navaja suiza decidi intentar abrir uno, lo consegui pero esmejor como lo hacen los locales, ellos utilizan un machete de casi medio metro, aun asi tarde una hora pero bebimos el agua del coco.

Siguiente destino: Corcovado.
Llegar alli es toda una aventura, coges 2 autobuses y llegas a Sierpe y desde alli un bote para llegar a Bahia Drake, pasando por manglares y llegando a mar abierto. Como siempre nos pillo la lluvia, esta vez en el bote y nos puso como unas sopas, el desembarco cargados con la mochila y el agua hasta las rodillas y lloviendo a mares fue toda una odisea.
Menos mal que nos esperaban los del hostel, nos llevaron en la parte de atras de un pickup.

Al dia siguiente a las 5h00 salimos para P.N. Corcovado, tuvimos que embarcar en la playa, una tia tardo demasiado y una ola grande nos cogio de lleno rompiendo unas ventanitas del bote y empapandonos a los que ya estabamos embarcados. Una hora mas tarde desembarcamos en la entrada de la Sirena donde empezo nuestro recorrido por el parque, este es uno de los mas grandes y el que mas biodiversidad alberga, de hecho vimos, a parte de los monos y perezosos que ya habiamos visto, el mono araña, trogones (familia del Quetzal), tucanes (muy divertido su vuelo, como les pesa el pico, han de remontar el vuelo), pekaris (parecidos a los javalis), pavos salvajes, etc. Tambien tuvimos la suerte de ver al Tapir, que es uno de los animales mas dificiles de ver. En este parque los senderos son un poco mas salvajes, hay que andar en barro y cruzar rios todo muy calladitos para no asustar a los animales. Para rematar la faena, la misma tia de antes nos volvio a hacer lo mismo y otra ola nos pillo de lleno, con el consiguiente enfado hacia su persona.

Al dia siguiente salimos a recorrer la costa ya que nos lo habian recomendado, el paseo comenzo muy bien en un arbol vimos muchos guacamayos (lapas rojas) es muy bonito verlos en libertad, vuelan en parejas ya que pasan toda la vida con la misma, luego nos adentramos en un sendero que te lleva a playas desiertas, es una gozada tener una playa para ti solito. Como no, tambien vimos bichos, basiliscos, iguanas, un monton de lagartijas y alguna que otra serpiente (no venenosas).

Nuestro siguiente destino fue Golfito para llegar alli cogimos un bus que tuvo que vadear mas de un rio y en una ocasion casi se queda en un barrizal. Despues un bote que cruzaba el Golfo dulce. De Golfito poco hay que decir, es un agujero inmundo entre tanta belleza, solo podemos destacar dos cosas: los borrachos y el Desposito Libre, una especie de dutty free gigante.

Machupicchu, por fin!

Después de ver las ruinas y el pueblo de Oyaitatambo nos fuimos a buscar los autobuses que van a Piscacuccho, debido a las lluvias de los meses anteriores hubo derrumbes que destruyeron las vías, conseguimos que nos llevasen gratis, que es un logro en Perú!
Fuimos con bastante tiempo de antelación y en Piscacuccho todo es carisimo, de un ratito a otro, los caramelos de coca, suben como 2 soles (medio euro).
La hora llego e hicimos la fila para coger el tren, este es moderno con vistas panorámicas, claro que por la noche no se ve un carajo. Así que no hay mucho que contar.
Al llegar a Aguas calientes, mas de lo mismo, ofertas de hostel etc. etc.
Unos argentinos nos recomendaron uno, pero no hubo acuerdo en el precio y acabamos en otro, se nota en los precios la nube del volcán en Europa, todo estaba "muy barato".
Nos fuimos a dormir prontito, que al día siguiente nos tocaba "el madrugón", pues si no llegas entre los 400 primeros no te dejan subir a Wainapicchu.
A eso de las 4h00 se toco diana y a las 4h30 ya estábamos haciendo cola para subir al bus, eso si con un cafetin.
Al llegar a la entrada, cogimos el ultimo pase para Wainapicchu, después ya no repartieron mas, llegamos por los pelos!
Nos buscamos un guia, aunque ya habíamos leído bastante, recomiendan tener uno para que te explique la composición e historia de Machupicchu. El nuestro apodado "el Gato" no nos pareció del todo bueno, pero hizo su cometido, visitamos las terrazas agrícolas, desde donde se tiene una visión típica de la ciudad, es muy emocionante ver como aparecer la ciudad entre las nubes. Allí el guia nos dio la primera charla y acto seguido pasamos a la entrada principal de la ciudad.
Mas tarde visitamos el templo del Agua con sus fuentes, el templo del Sol, curioso tiene dos ventanas por donde entran los rayos del Sol y anuncian los solsticio de verano e invierno, pasamos por el templo del Cóndor y el templo de las tres ventanas, para terminar a eso de las 9h30 en la Piedra Sagrada. Desde esta te queda a solo dos pasos la entrada a Wainapicchu. Un descansito y comenzamos la subida, curioso hay que inscribirse en la entrada, pues algún turista se ha perdido en Wainapicchu. El caso que comenzamos a subir, con mas pena que gloria, se sigue notando la altura. Al final lo conseguimos y la verdad es que mereció la pena, las vistas de la ciudad sagrada son inmejorables. Otro descanso y empezamos a bajar por el otro lado para alcanzar el templo de La Luna que esta detrás de Machupicchu, la bajadita fue casi peor que la subida, con escaleras de madera, otras escavadas en la pared, aveces te puedes sentir como un Indian Jones cualquiera, jeje!
El templo de la Luna es donde actualmente se siguen haciendo ofrendas en forma de hojas de coca, y tiene la particularidad de estar en una gran cueva, allí nos comimos los bocatas que llevábamos, y otra vez a subir, el camino estaba

muy chulo, con precipicios a nuestros pies y unas vistas increíbles, pero como cuesta subir las escaleras! Acabamos llegando al camino de subida a Wainapicchu, y un poco mas tarde estábamos otra vez en Machupicchu, nos quedaba tiempo para disfrutar por nuestra cuenta de la ciudad, recorrimos con mas detenimiento varias calles y nos recomendaron hacer el puente del Inca, allí fuimos, el lugar es un paseo por un camino labrado en la ladera de la montaña.
Si tienes un poco de vértigo no te aconsejo hacer el camino aunque es muy bonito.

Para rematar nuestro plan decidimos bajar andando desde Machupicchu, la bajada se hace muy bien por un caminito perfectamente señalado, pero acabamos con las piernas destrozadas de tantos escalones subidos y bajados.
Llegamos a Aguas calientes muertos pero muy contentos de haber visto por fin Machupicchu!
Al día siguiente regresamos en tren a Piscacuccho, esta vez fue por el día y las vistas son impresionantes, tanto por el paisaje por el cañón del río Urubamba ( o río Vilcanota) como por las ruinas que se ven.
También pudimos ver los destrozos que hizo el río en el recorrido del tren y algunos puntos por donde pasa la gente que hace el camino del Inca.
A nuestra llegada a Piscacuccho nos metieron en una furgoneta que nos dejo en Oyaitatambo, desde allí tomamos un "bus" que nos dejo en Chinchero, el ultimo pueblo que nos quedaba por ver del Valle Sagrado, el único atractivo de este pueblo es su iglesia, que es muy bonita con un artesonado precioso y los telares que hay por casi todas las calles, donde puedes ver como se confeccionan los distintos artículos típicos.

Cuzco y el Valle Sagrado

Llegamos después de un viaje un poco chungo en el bus, la policía sube a eso de las 2h00 diciendo que revisemos nuestras cosas, que hay robos, después el bus se queda casi 1 hora parado sin expoliación ninguna, se había roto!

Al final llegamos a Cuzco, oferta de taxi y hostel por doquier, decidimos dejar la maleta en una consigna y buscar hostel, fuimos a uno que estaba mas o menos bien, pero se repitió la historia y al volver de recoger las maletas no había ni Blas, a buscar otro, dimos con el Hatum Tumi, no vayáis nunca! el hostel en si no esta mal, pero la chica que lo regenta es un poco desastre.
El primer día no dio para mucho, estábamos hechos polvo después del viaje, así pues nos lo tomamos con relax, dar un paseo por la ciudad y ver que se cocía, ese mismo día, nos dimos cuenta de que el camino del Inca era misión imposible, por precio y por cuestiones físicas, y es que el mal de altura seguía haciendo de las suyas.
El segundo día fue peor con un ataque a Mar de mal de altura, es como estar todo el dia grogy, así pues mas relax, eso si seguíamos en nuestra tarea de información para llegar a Machu Picchu, además dimos con una agencia que parecía de confianza y pillamos unos tours con ellos.
Primer Tour: City tour, ya se que suena muy manido, jeje, pero es que Cuzco tiene mucho que ver, el tour nos llevo a ver el Koricancha (templo del Sol) que esta en la misma ciudad y que ahora tiene encima de las ruinas una iglesia colonial, una pena, allí es donde los quechuas adoraban al dios Inti, y al parecer tenia paredes cubiertas de oro, ya dieron cuenta nuestros antepasados de ello, solo quedan las paredes!
Después fuimos a ver Sacsayhuaman, una explanada a las afueras de Cuzco donde se estaba construyendo un gran templo, no dio tiempo pues llegaron nuestros tatarabuelos, allí también se enfrentaron las tropas de Pizarro contra Manco Inca, con un resultado de empate a uno, la primera batalla la perdió Pizarro, la segunda la gano.
Después fuimos a Quenko un conjunto de piedras labradas donde se hacían sacrificios para ver como seria la cosecha, aplacar a los dioses etc.
Nuestra tercera visita fue a Puka Pukara o la Fortaleza Roja, desde donde se domina parte del valle que da acceso a Cuzco, evidentemente es una construcción defensiva.
Al ladito esta nuestro siguiente destino, Tambo Machay, la fuente del Inca, una fuente que recibe el agua de los nevados cercanos a Cuzco y que los quechua supieron canalizar hasta este punto.Ya no dio para mas y volvimos a Cuzco.
Al siguiente día fuimos a otra excursión por los pueblo de Maras y Moray, el primero no tiene nada de maravilloso, es un pueblo semi-abandonado, pero a las afueras esta Moray, o los laboratorios de los Incas, son unos anillos concéntricos y escabados en la montana aprovechando la orografía del terreno, los quechuas plantaban distintos tipos de cultivos adaptandolo a la difícil orografía de su imperio, así pudieron plantar maíz en altura o papas en sitios de mucho calor.

Vuelta al autobús y nos fuimos derechitos a las salinas de Maras, por una carreterita de miedo, un par de veces el autobús reculo para dar paso a un coche, todo esto con la emocion del barranco que teníamos a nuestro costado. Las salinas son artificiales, el agua que sale de la montaña ya viene salada y ellos la embocan a unas parcelitas de unos 15 cm. de profundidad donde el agua se evapora y queda la sal, hay muchisimas, visto en conjunto es impresionante.

Al día siguiente ya por nuestra cuenta nos fuimos a Pisac, como era domingo había un gran mercado, tanto de artesanía como de comida, es curioso porque el mercado rodea un árbol sagrado para los quechuas, el cual es impresionante, pero con tanto puesto resultaba difícil verlo.

Subimos a ver las ruinas, que están en una montaña cercana, el conjunto es de lo mas completo, con varias edificaciones en distintos puntos y un cementerio de tumbas colgantes, nos tomo su tiempo recorrerlo todo, pero mereció la pena, después una bajadita por la ladera de la montaña para llegar al pueblo y para Cuzco.

Ya para terminar nos quedaba Oyataitambo, que son mas ruinas, pero estas tienen una cosita de especial y es que están en el pueblo desde donde hay que empezar el recorrido a Machu Picchu, el pueblo es de típica construccion inca, se pueden ver sus muros inclinados y las canalizaciones, las ruinas como casi todas estan compuesta de unas terrazas y en lo alto domina el pueblo con el tipico templo a Inti.
Hasta aqui el Valle Sagrado.